La etapa dos del segundo ciclo de vacunación contra la fiebre aftosa y la brucelosis bovina inicia este 18 de enero y se extenderá hasta el 2 de marzo del presente año y se realizara en los 15 departamentos que no inmunizaron sus hatos en la etapa uno, la cual se llevo a cabo a finales de 2015.
Esta vacunación la deben realizar los ganaderos de Antioquia, Boyacá, Caldas, Caquetá, Cauca, Chocó, Cundinamarca, Huila, Nariño, Putumayo, Quindío, Risaralda, Santander, Tolima y Valle del Cauca, y en los municipios de San Juanito y El Calvario del departamento del Meta y San Jacinto del Cauca en el departamento de Bolívar.
En los predios definidos por el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, como de alto riesgo de ocurrencia de fiebre aftosa o aquellos con más de 500 bovinos, la vacunación deberá ejecutarse durante las tres primeras semanas de la etapa dos del segundo ciclo de vacunación, por lo cual las organizaciones gremiales ganaderas autorizadas, deben ajustar su programación para llevar a cabo la inoculación durante este período.
La ejecución de la vacunación estará bajo la responsabilidad de Fedegan y únicamente se podrán usar lotes de vacunas registradas contra la fiebre aftosa y la brucelosis bovina que hayan sido evaluados y aprobados por el ICA.
Los animales que procedan de zonas libres sin vacunación como son el Noroccidente del Chocó y San Andrés, y sean movilizados a zonas donde la medida es obligatoria, deberán ser inmunizados contra la fiebre aftosa en su lugar de destino.
La importancia de la vacunación
La fiebre aftosa es una enfermedad de notificación obligatoria a las autoridades sanitarias y está catalogada como una enfermedad que restringe la posibilidad del comercio internacional de animales, genética, carne y leche. En mayo de 2009, Colombia recibió de la Organización Mundial de Sanidad Animal, la certificación de país libre con vacunación. El objetivo general de este programa es asegurar la consolidación de los estatus sanitarios que requiere el país para el ingreso a los mercados internacionales y para la protección de los consumidores y generar oportunidades reales a los ganaderos del país.
Gracias a la rigurosidad en los procesos de vacunación contra la fiebre aftosa en todo el país, la ganadería nacional ha preservado este estatus sanitario, lo que permitió mantener los mercados y abrir nuevos para la carne colombiana y animales en pie en el mundo.
Colombia tiene mercado abierto en 7 países, entre los que se encuentran Rusia, Jordania, Irak y en proceso de admisibilidad a 18 países más entre los que están Estados Unidos y Canadá.