El punto uno de la agenda de dialogo del proceso de paz que se lleva a cabo en la Isla de Cuba entre el Gobierno Nacional y la guerrilla de las Farc, fue firmado el 21 de junio de 2013, siendo esta la base en la cual está sustentado el futuro acuerdo de paz en Colombia.
Cerrar la brecha entre el campo y la ciudad ha sido la frase que solidifica la importancia de este punto, con el que se busca una verdadera reforma rural integral que garantice la igualdad en el campo y la erradicación de la pobreza.
Es por esta razón que el acceso y el uso de la tierra tienen que permitir fortalecer la economía campesina y lograr una verdadera formalización de la propiedad. Formalización que está inmersa el camino que se debe seguir para restablecer también el derecho de aquellos que tuvieron que abandonar o ceder sus predios, forzados por los grupos armados ilegales, y que hoy en día están logrando retornar a sus tierras.
Dentro de este camino el Gobierno Nacional trabaja arduamente en restablecer estos derechos, y a través de la Unidad de Restitución de Tierras ha conseguido mostrar un balance, que si bien no es el anhelado, muestra un avance.
De acuerdo a la Ley 148 de 2011, la Unidad para la Restitución de Tierras recibiría y tramitaría alrededor de 360.000 solicitudes durante los 10 años de vigencia, y de acuerdo a las cifras entregadas el pasado 18 de diciembre, se han presentado 85.962 solicitudes y más de 41.000 de ellas ya se encuentran en etapa administrativa.
Viendo el panorama, y ya cuando se va a cumplir la primera mitad de esta Ley, no se llega al 30 % de la meta, pero el trabajo que se viene realizando en todo el territorio nacional, las nuevas metodologías para desarrollar estos procesos, la experiencia adquirida y las proyecciones que se tienen, en los próximos años estas cifras aumentaran a un ritmo más acelerado y se podrá cumplir.
Esta es la forma de sembrar la semilla de la paz en Colombia, la de brindar tierras a los campesinos y tener así un país de propietarios rurales que cuente con un acompañamiento con una verdadera “política de desarrollo agrario integral”.
Cifras de la Unidad de Restitución de Tierras